jueves, 7 de agosto de 2008

Sophie Marceau, una musa moderna

Sophie Danièle Silvie Maupu, mejor conocida como Sophie Marceau, nacida en París en el año 1966, actriz, directora, guionista en menor medida, y diosa inspiradora, es decir, musa.
Como no sé nada de ella hasta los 14 años, voy a saltar hasta 1980, un año importantísimo para su vida y carrera, el año de su debut en el cine a manos del director francés Claude Pinoteau con la película 'La boum' (La fiesta), la primera con la que consigue encandilarme interpretando a la simpática niñita Vic Beretton, una adolescente que se enamoraba por primera vez en su vida de un tal Matthieu. Ese primer amor que dicen que nunca se olvida... Y un par de años más tarde regresaba con 'La boum 2' (Quince años recien cumplidos), de nuevo con Pinoteau, donde Vic se nos volvía a enamorar de otro chico, en esta ocasión de Philippe, aunque con Matthieu todavía más que presente.

Vi la primera una mañana nada más levantarme en versión original hace algún tiempo, me pareció agradable, lo que no me imaginaba es que al día siguiente, a la misma hora, fueran a poner la segunda parte, es más, cuando la vi, ni sabía que hubiera una segunda parte, pero lo que jamás podría haber supuesto es que me fueran a entretener tanto (lo reconozco). Tal vez fue la propia aparición de Sophie lo que me quedó hipnotizado para verlas.
Dos películas que le auguraban a Sophie todo el futuro que ha tenido y que tiene por delante. Dos piezas clave para comenzar a tratar a esta chica como una divinidad. Dos obras con las que esta dulce chiquita de quince años recien cumplidos le abrió los ojos a toda Francia y al mundo entero.



Después actuaría en una serie de películas que la encumbrarían en su país natal. 'Fort Saganne' por ejemplo, escrita y dirigida por Alain Corneau, en la que compartía cartel nada más y nada menos que con Gérard Depardieu (con el que también coincidió un año después en 'Police') y con Catherine Deneuve.
En 1985, con 19 años, conocería a su futura pareja, el polaco Andrzej Zulawski (26 años mayor que ella) que la dirigió en 'L'Amour braque' además de en otros tres filmes. Ambos tienen un hijo llamado Vincent.
Regresó de nuevo con Pinoteau en 'L'Étudiante' en el 88.
En el 91 y en el año 1993, a mí me vuelve a encandilar, en esta ocasión con 'Pour Sacha' y 'Fanfan', junto a Vincent Pérez. Fanfan es una joven que intenta enamorar más si cabe al hombre de su vida, el cual la ama, pero lo disimula. Que conste que no voy a hacer ninguna crítica acerca de las películas que estoy nombrando, porque aquí estamos hablando de Sophie. De una mirada, de una sonrisa...



En 1995 comenzaría a extender fronteras de la mano de Mel Gibson con 'Braveheart', la película histórica sobre el héroe escocés William Wallace ganadora de 5 Oscars. También en el 95 aparece con 'Al di là delle nuvole' (Beyond the Clouds) de Michelangelo Antonioni y Wim Wenders, y encandilamiento al canto, apareciendo tal y como vino a este mundo junto al actor de prestigio John Malkovich y otros conocidos como el hijo predilecto de Cádiz Jean Reno, Irène Jacob y Vincent Pérez de nuevo.
Cuatro años después, se convertiría en chica Bond en 'El mundo nunca es suficiente'.
Más tarde haría sus pinitos como directora y guionista con 'Parlez moi d'amour' (Háblame de amor), premio a la mejor dirección en el festival de Montreal, continuando así su primera incursión en el 95 tras haber escrito y dirigido su primer cortometraje 'L'Aube à l'envers'.
Estuvo entre el magnífico reparto de 'El sueño de una noche de verano', la adaptación de la obra de Shakespeare.

En el 2005 tuvo un pequeño desliz en el Festival de Cannes, cuando el escote de su vestido le jugó una mala pasada, un descuido que supo solventar bastante bien, aunque no evitó que las cientos de cámaras que había por allí captaran el momento.
Ese mismo año estrenó una gran película, que recuerdo fui a ver el mismo día del estreno, se trataba de 'Anthony Zimmer' (El secreto de Anthony Zimmer), un film con guiños claros a Hitchcock dirigida por Jérôme Salle que coprotagonizaba con Yvan Attal. Sophie es Chiara, el único punto débil que se le conoce a un reconocido estafador que responde al nombre de Anthony Zimmer, del cual no se sabe nada más, ni siquiera qué aspecto tiene. Sin duda una buena historia de acción y misterio, bien contada y bien interpretada, y aquí me voy a permitir el lujo de criticar aunque me contradiga a mí mismo, porque al fin y al cabo, no sé si lo he dicho alguna vez, éste es mi blog. Una película digo, bien llevada, que tiene un final que te mantiene en tensión y duda hasta el último momento.

En el 2007 ha vuelto a dirigir y a escribir con 'La Disparue de Deauville', interpretada por ella misma y por Christopher Lambert, aunque yo considero que lo mejor es que se dedique única y exclusivamente a lo suyo, a lo que mejor sabe hacer, a actuar, o en su defecto a servir de musa, que también lo hace bastante bien. De momento rueda 'Lol' y tiene prevista de estreno 'No te retourne pas' junto a Monica Bellucci.

Y yo que necesito inspirarme un poco...

1 comentario:

Sun-T dijo...

Como bien dices: una mirada, una sonrisa....(y yo añado) una presencia. Un ejemplo comparable a las grandes actrices clasicas. Junto con Cate Blanchett de lo mejorcito en el panorama actual. Ya te echaba de menos estas vacaciones nos tienen a todos un poco alejados de los blog
Un abrazo desde la ataraxia