Éste es un extracto de una entrevista realizada al director de fotografía Harris Savides, para mí uno de los grandes genios tras una cámara que puede haber en la actualidad junto a Roger Deakins. A Savides creo haberle nombrado por aquí en alguna que otra ocasión. Ha trabajado con directores de la talla de James Gray, Gus Van Sant, Noah Baumbach, David Fincher, Woody Allen y en la próxima película de Sofia Coppola, Somewhere. Se deselvuelve como nadie a la hora de conseguir looks setenteros (Milk, Zodiac, American Gangster), y utiliza unos colores que recuerdan ineludiblemente a otros grandes de este oficio como Gordon Willis, Néstor Almendros y Laszlo Kovacs.
Aparte de su trabajo en el cine, Harris tiene el honor de haber sido la única persona en ganar tres MTV Music Video Awards a la mejor fotografía, dos de ellos consecutivos por "Rain" de Madonna y "Everybody Hurts" de R.E.M. Su estilo es claro: imágenes puras y nada llamativas, un estilo simple, austero, naturalista y digno de ser contemplado.
Llevas ya un tiempo trabajando con Noah Baumbach; él parece un guionista y un director muy vital, pero en las películas Greenberg y Margot y la boda existe un tono muy orgánico y dinámico en cuanto a la calidad de imagen se refiere.
Cuando me invitaron a participar en Margot y la boda, Noah ya tenía en su cabeza una idea muy preconcebida de lo quería realizar. Me recomendó que viera algunas películas para que me metiera de lleno en su visión, y la primera que me mostró fue La Coleccionista, de Eric Rohmer.
Una película que por cierto tiene una dirección de fotografía estupenda de Néstor Almendros. ¿Había algo específico en ella en lo que tuvieras que fijarte?
Creo que era simplemente la calidad de imagen o su escasez de resolución. Noah tan sólo quería tener algo en su película que recordara a aquellas que Néstor filmó durante los años 70. En especial ésta de la que hablamos.
¿Y cómo consigues ese toque? ¿Es la mezcla de encontrar una determinada luz con grabar cámara en mano?
Nosotros intentamos usar toda la luz natural posible, y sí, también la cámara en mano, aunque ahora últimamente la gente tiende mucho a hacer este tipo de cosas, y en la mayoría de los casos parece un recurso demasiado estilizado.
Ahora mismo me viene una secuencia a la cabeza de Margot y la boda, cuando el personaje de John Turturro hace su aparición. En ella hay una enorme belleza en la luz del sol, sin embargo, no la vemos demasiado recalcada.
Recuerdo que grabamos con varias cámaras ese día simplemente para no perder detalle en ninguna de las interpretaciones. Puede que llegáramos a tres cámaras sólo para tratar de conseguir la mayor espontaneidad posible entre los actores en una sola toma. Cuando Noah está grabando se trata de focalizar la atención en el diálogo.
¿Cómo abordaste la iluminación de la película? Lo digo porque en cierto sentido parece algo desembellecida.
Precisamente lo que trato de hacer es mantener una iluminación natural y simple, no hacerla demasiado espectacular o demasiado bella. Para mí tiene que parecer real, y creo que eso también es importante para Noah. Creo que existe un cierto artificio en las fotografías demasiado finas o hechas con demasiado esmero. A veces funciona, bueno, de hecho funciona la mayoría de las veces, pero para mí un enfoque más natural me parece más interesante y no hace parecer la imagen tan postiza y premeditada.
¿Qué nos puedes contar de Greenberg? ¿Hubo alguna película de los años 70 en la que te fijaras? ¿Quizá alguna que estuviera rodada en Los Ángeles (lugar donde se desarrolla la película)?
Estuvimos ojeando El largo adiós, de Robert Altman y Five Easy Pieces (Mi vida es mi vida). Cuando Noah me mencionó esas dos peliculas yo ya sabía exactamente lo que quería, pero no se trata de imitar una película, sólo de tener referencias.
Entrevista realizada por David Schwartz para Museum of the Moving Image.
miércoles, 31 de marzo de 2010
jueves, 25 de marzo de 2010
Joy Zipper
Curioso y atractivo nombre para un grupo de música. Joy Zipper, a pesar de que llevan ya varios años sin sacar disco, siguen siendo uno de los que más me gusta escuchar. ¿No les conocéis? No pasa nada, para eso estamos.
Para empezar, más que un grupo, ellos son un dueto formado por Vincent Cafino y Tabitha Tindale, residentes en un pequeño estudio de Long Island. Su nombre en realidad proviene del verdadero nombre de la madre de Tabitha, que aparece con ella en la portada de su primer disco. Joy Zipper hacen una música a la que se viene denominando como dream pop, caracterizada por una serie de sonidos placenteros para los oídos, pero ellos además le añaden un toque a veces más eléctrico, y a pequeñas dosis incluso rockero. Para mí, Tabitha a los teclados y Vincent a la guitarra hacen una mezcla melódica de lo más agradable. ¿Sus influencias? Desde los Beach Boys, pasando por Velvet Underground, hasta My Bloody Valentine. También se les ha llegado a comparar con el dúo danés The Raveonettes.
Vinny Cafino me resulta además uno de los mejores guitarristas norteamericanos no reconocidos popularmente junto a Dean Wareham, Glenn Mercer, Bill Million y quizás James Murphy.
En el año 2000 sacaron a la luz su primer disco, llamado Joy Zipper, un disco para mi gusto demasiado experimental y arriesgado para tratarse de un debut. Sin embargo, el atrevimiento tuvo su premio y como consecuencia el reconocimiento. Las canciones más destacables de este primer trabajo son a mi parecer Check Out My New Jesus, Everyday y The Power of Alan Watts. Un disco, repito, tremendamente osado.
Joy Zipper - "The Power of Alan Watts"
En el 2003 publican su segundo álbum, American Whip, que obtuvo buenas críticas y una gran repercusión sobre todo en el Reino Unido. En él no dejan los experimentos de lado, pero también aparecen grandes temas y sus primeros éxitos como Out of the Sun y Baby You Should Know. Buenos sonidos a los que acompañaban de forma inmejorable otras canciones como Ron, Dosed and Became Invisible y la genial Christmas Song, una de las dos únicas canciones con la palabra Navidad en el título que me gustan.
Por aquellas mismas fechas también podíamos encontrar en el mercado The Stereo and God, un EP (Extended Play) con nuevas canciones que servía como aperitivo para su siguiente y último disco hasta ahora: The Heartlight Set, lanzado en el año 2005. Mi favorito junto a American Whip. En él se pueden escuchar temazos como Go Tell The World, 1, o la genialmente escrita For Lenny's Own Pleasure.
Joy Zipper - "1"
Algunas de sus canciones han sido utilizadas como banda sonora en diversas series de televisión como 'The O.C' (que ha tenido una de las mejores bso de nuestra caja tonta) y 'Anatomía de Grey'. Tampoco faltan en su discografía versiones de otros grupos como el fantástico Wave of Mutilation de los Pixies o la maravillosa Just Like Heaven de The Cure. Temas que merecen la pena ser escuchados también con la voz de nuestros queridos Vinny y Tab (Joy Zipper).
Joy Zipper - "Just Like Heaven"
Durante los últimos años, el dúo ha aprovechado para participar en algunas colaboraciones especiales y homenajes. También para contraer matrimonio en una ceremonia celebrada por todo lo alto en la playa de Delray Beach, Florida, consolidando así una relación iniciada desde 1991, cuando Tabitha vio a Vinny tocar la guitarra en una batalla de bandas en Long Island. Ella se interesó por él, y éste le contestó que ella tenía la nariz de Bob Hope, probablemente un insulto para cualquier mujer, pero poco después descubrieron que estaban hechos para la música, el uno para el otro. Mientras se siguen demostrando su amor, yo espero que saquen un nuevo disco pronto.
Para empezar, más que un grupo, ellos son un dueto formado por Vincent Cafino y Tabitha Tindale, residentes en un pequeño estudio de Long Island. Su nombre en realidad proviene del verdadero nombre de la madre de Tabitha, que aparece con ella en la portada de su primer disco. Joy Zipper hacen una música a la que se viene denominando como dream pop, caracterizada por una serie de sonidos placenteros para los oídos, pero ellos además le añaden un toque a veces más eléctrico, y a pequeñas dosis incluso rockero. Para mí, Tabitha a los teclados y Vincent a la guitarra hacen una mezcla melódica de lo más agradable. ¿Sus influencias? Desde los Beach Boys, pasando por Velvet Underground, hasta My Bloody Valentine. También se les ha llegado a comparar con el dúo danés The Raveonettes.
Vinny Cafino me resulta además uno de los mejores guitarristas norteamericanos no reconocidos popularmente junto a Dean Wareham, Glenn Mercer, Bill Million y quizás James Murphy.
En el año 2000 sacaron a la luz su primer disco, llamado Joy Zipper, un disco para mi gusto demasiado experimental y arriesgado para tratarse de un debut. Sin embargo, el atrevimiento tuvo su premio y como consecuencia el reconocimiento. Las canciones más destacables de este primer trabajo son a mi parecer Check Out My New Jesus, Everyday y The Power of Alan Watts. Un disco, repito, tremendamente osado.
Joy Zipper - "The Power of Alan Watts"
En el 2003 publican su segundo álbum, American Whip, que obtuvo buenas críticas y una gran repercusión sobre todo en el Reino Unido. En él no dejan los experimentos de lado, pero también aparecen grandes temas y sus primeros éxitos como Out of the Sun y Baby You Should Know. Buenos sonidos a los que acompañaban de forma inmejorable otras canciones como Ron, Dosed and Became Invisible y la genial Christmas Song, una de las dos únicas canciones con la palabra Navidad en el título que me gustan.
Por aquellas mismas fechas también podíamos encontrar en el mercado The Stereo and God, un EP (Extended Play) con nuevas canciones que servía como aperitivo para su siguiente y último disco hasta ahora: The Heartlight Set, lanzado en el año 2005. Mi favorito junto a American Whip. En él se pueden escuchar temazos como Go Tell The World, 1, o la genialmente escrita For Lenny's Own Pleasure.
Joy Zipper - "1"
Algunas de sus canciones han sido utilizadas como banda sonora en diversas series de televisión como 'The O.C' (que ha tenido una de las mejores bso de nuestra caja tonta) y 'Anatomía de Grey'. Tampoco faltan en su discografía versiones de otros grupos como el fantástico Wave of Mutilation de los Pixies o la maravillosa Just Like Heaven de The Cure. Temas que merecen la pena ser escuchados también con la voz de nuestros queridos Vinny y Tab (Joy Zipper).
Joy Zipper - "Just Like Heaven"
Durante los últimos años, el dúo ha aprovechado para participar en algunas colaboraciones especiales y homenajes. También para contraer matrimonio en una ceremonia celebrada por todo lo alto en la playa de Delray Beach, Florida, consolidando así una relación iniciada desde 1991, cuando Tabitha vio a Vinny tocar la guitarra en una batalla de bandas en Long Island. Ella se interesó por él, y éste le contestó que ella tenía la nariz de Bob Hope, probablemente un insulto para cualquier mujer, pero poco después descubrieron que estaban hechos para la música, el uno para el otro. Mientras se siguen demostrando su amor, yo espero que saquen un nuevo disco pronto.
viernes, 19 de marzo de 2010
Two Lovers. Cuando el cine es cine
En estos días en los que el tiempo se me pasa volando y no siempre tengo un hueco para actualizar el blog, no puedo dejar de lado el cine, que es mi vida, así que intento seguir viendo un gran número de películas a lo largo de la semana, y a veces, entre ese gran número me encuentro con alguna grata sorpresa que merece ser mencionada aquí porque logra engancharme, divertirme, entretenerme, emocionarme, revolverme... En definitiva, porque logra hacerme sentir cosas. La última que lo ha conseguido ha sido 'Two Lovers', de James Gray. Una auténtica obra de arte que desde ya mismo os recomiendo que veáis, porque cuando el cine es cine, éste merece ser compartido.
James Gray, por si no le conocéis, debutó en los 90 con una película titulada 'Little Odessa', que contaba con actores de la talla de Tim Roth y Vanessa Redgrave. Aquí se llamó 'Cuestión de Sangre'. Gray tenía solamente 24 años cuando se estrenó, y aunque pasó muy desapercibido, ya consiguió cautivar la mirada y el interés de mucha gente. Desde entonces se ha querido ver a este guionista y director como uno de los sucesores del cine de Francis Ford Coppola, y algo de ello hay, aunque no sé si llega a tanto. En cualquier caso, en esta nueva década debería confirmar su enorme talento ahora que ya ha conseguido hacerse un nombre importante en la industria.
Hasta el momento sus historias siempre han hablado acerca del hogar y de la familia, pero no de una forma usual, sino desde un punto de vista muy negro, con mafiosos, asesinos, policías. Sus dos siguientes películas ya dentro del nuevo milenio son una clara muestra de ello. Ahí están 'The Yards' (La otra cara del crimen), y quizás su película más conocida de momento, 'We Own the Night' (La noche es nuestra). Ambas protagonizadas por sus dos grandes amigos Mark Wahlberg y Joaquin Phoenix, a quien podríamos considerar como su actor fetiche. James Caan, Robert Duvall, Charlize Theron y Eva Mendes también han tenido el honor de trabajar con él.
En el 2008 realiza Two Lovers, película que increíblemente no se ha estrenado aún en España. Y yo me pregunto a qué esperan, o al menos a qué esperan para traérnosla en dvd. Curiosamente, la película se desarrolla en Brighton Beach, Brooklyn, el mismo lugar en el que transcurrían los hechos de Little Odessa. En éste, su último trabajo hasta la fecha, Gray deja de lado el tema criminal para acercarse al romance y abordarlo con un dramatismo tan abismal que te deja hecho polvo. Y por eso me resulta tan especial, por su tratamiento, por su guión (coescrito con Ric Mennello) sobrio y perfectamente amueblado, por sus sólidas interpretaciones y por la genial dirección ya no sólo a nivel de actores, también de estilo visual, con una inmejorable agilidad para la selección de planos.
Merece su propio apartado Joaquin Phoenix, que borda una interpretación que roza lo perfecto. Es una pena que después de esto dejara el cine por el rap, porque el mundo está perdiendo a un actorazo. Dicen algunos rumores que todo es un montaje para un documental que está rodando con Casey Affleck, y que Joaquin se está quedando con todos nosotros.
Two Lovers trata acerca de un hombre llamado Leonard Kraditor (Joaquin Phoenix), un soltero con tendencias suicidas que vive en casa de sus padres y trabaja en un pequeño negocio familiar. Ese pequeño negocio podría prosperar si Leonard se casara con Sandra (Vinessa Shaw), la hija de un socio de su padre. Sin embargo, un día, Leonard conoce a la atractiva Michelle (Gwyneth Paltrow), su nueva vecina, de quien se enamora perdidamente desde su primer encuentro. Puede parecer un argumento simple o normal, pero no lo es. Completan el reparto Isabella Rosellini, Moni Moshonov y Elias Koteas.
Yo os vuelvo a recomendar encarecidamente que la veáis y opinéis, y si os llega a gustar tanto como a mí, al final no tendréis más remedio que dejar caer alguna lágrima y aplaudir, porque aunque James Gray todavía no lo es abiertamente, estoy seguro de que llegará a ser uno de los grandes.
James Gray, por si no le conocéis, debutó en los 90 con una película titulada 'Little Odessa', que contaba con actores de la talla de Tim Roth y Vanessa Redgrave. Aquí se llamó 'Cuestión de Sangre'. Gray tenía solamente 24 años cuando se estrenó, y aunque pasó muy desapercibido, ya consiguió cautivar la mirada y el interés de mucha gente. Desde entonces se ha querido ver a este guionista y director como uno de los sucesores del cine de Francis Ford Coppola, y algo de ello hay, aunque no sé si llega a tanto. En cualquier caso, en esta nueva década debería confirmar su enorme talento ahora que ya ha conseguido hacerse un nombre importante en la industria.
Hasta el momento sus historias siempre han hablado acerca del hogar y de la familia, pero no de una forma usual, sino desde un punto de vista muy negro, con mafiosos, asesinos, policías. Sus dos siguientes películas ya dentro del nuevo milenio son una clara muestra de ello. Ahí están 'The Yards' (La otra cara del crimen), y quizás su película más conocida de momento, 'We Own the Night' (La noche es nuestra). Ambas protagonizadas por sus dos grandes amigos Mark Wahlberg y Joaquin Phoenix, a quien podríamos considerar como su actor fetiche. James Caan, Robert Duvall, Charlize Theron y Eva Mendes también han tenido el honor de trabajar con él.
En el 2008 realiza Two Lovers, película que increíblemente no se ha estrenado aún en España. Y yo me pregunto a qué esperan, o al menos a qué esperan para traérnosla en dvd. Curiosamente, la película se desarrolla en Brighton Beach, Brooklyn, el mismo lugar en el que transcurrían los hechos de Little Odessa. En éste, su último trabajo hasta la fecha, Gray deja de lado el tema criminal para acercarse al romance y abordarlo con un dramatismo tan abismal que te deja hecho polvo. Y por eso me resulta tan especial, por su tratamiento, por su guión (coescrito con Ric Mennello) sobrio y perfectamente amueblado, por sus sólidas interpretaciones y por la genial dirección ya no sólo a nivel de actores, también de estilo visual, con una inmejorable agilidad para la selección de planos.
Merece su propio apartado Joaquin Phoenix, que borda una interpretación que roza lo perfecto. Es una pena que después de esto dejara el cine por el rap, porque el mundo está perdiendo a un actorazo. Dicen algunos rumores que todo es un montaje para un documental que está rodando con Casey Affleck, y que Joaquin se está quedando con todos nosotros.
Two Lovers trata acerca de un hombre llamado Leonard Kraditor (Joaquin Phoenix), un soltero con tendencias suicidas que vive en casa de sus padres y trabaja en un pequeño negocio familiar. Ese pequeño negocio podría prosperar si Leonard se casara con Sandra (Vinessa Shaw), la hija de un socio de su padre. Sin embargo, un día, Leonard conoce a la atractiva Michelle (Gwyneth Paltrow), su nueva vecina, de quien se enamora perdidamente desde su primer encuentro. Puede parecer un argumento simple o normal, pero no lo es. Completan el reparto Isabella Rosellini, Moni Moshonov y Elias Koteas.
Yo os vuelvo a recomendar encarecidamente que la veáis y opinéis, y si os llega a gustar tanto como a mí, al final no tendréis más remedio que dejar caer alguna lágrima y aplaudir, porque aunque James Gray todavía no lo es abiertamente, estoy seguro de que llegará a ser uno de los grandes.
lunes, 15 de marzo de 2010
Arctic Monkeys - Leave Before The Lights Come On
Dirigido por John Hardwick.
Interpretado por Paddy Considine (Dead Man's Shoes, 24 Hour Party People, El ultimátum de Bourne) y Kate Ashfield (Zombies Party, The Diary of Anne Frank, Collision).
martes, 9 de marzo de 2010
El análisis
LA CAPATAZ DE UN MUNDO DE HOMBRES
por Carlos Boyero
Kathryn Bigelow es una mujer extremadamente alta y de anatomía espléndida, rostro atractivo, melena cuidada, curvilínea, con movimientos sugerentes. Tiene 58 años muy cuidados. Si no conocieras su profesión, podrías deducir con escaso margen de error que fue actriz, bailarina, modelo, chica de calendario. Su imagen se presta al estereotipo fácil. Pero es directora de cine, capitana de barcos en los que desde sus ancestros casi toda la marinería son machos. La temática que le atrae y en la que ha demostrado tanta vocación como virtuosismo no son las historias intimistas y líricas, retratos de la sensibilidad femenina, comedias sutiles y demostrativas de la eterna lucha de sexos, sino la acción pura y dura, aventuras broncas y violentas habitadas mayoritariamente por hombres, un cine que despide aroma masculino. Yo me la imagino haciendo su trabajo como la teniente Ripley en la nave Nostromo, como la existencialista y forzosamente épica doctora Cartwigh en 7 mujeres, como Viena en Johnny Guitar. Cuestión no sólo de talento. También de personalidad, de ovarios.
Si repasas su filmografía, poblada por una policía femenina a la caza de asesino psicópata, atracadores surferos, cine negro y virtualidad en Los Ángeles del futuro, soldados rusos en un submarino nuclear a punto de hecatombe y otras temáticas sobre las que inevitablemente planea la sangre, no es sorprendente que esta directora se haya sentido en su ambiente contando la espeluznante cotidianidad, el obligado heroísmo, la incalculable sangre fría de especialista del ejército cuyo trabajo consiste en rastrear y desactivar bombas, en convivir permanentemente con la muerte tratando de ahuyentarla. En tierra hostil retrata ejemplarmente esa tensión, la sobredosis de adrenalina, el miedo, la neurosis que puede acarrear. Posee la atmósfera y el tono de los buenos documentales bélicos, la transmisión de esa cosa que puede ser intolerable y llamada realidad.
El lenguaje realista de Bigellow se ha impuesto al imaginativo y apabullante despliegue de efectos especiales, de milagros por ordenador, de sorpresas visuales que ha creado su ex marido James Cameron, el hombre que nunca se equivoca en las demandas del gran público, en esa historia que me resulta tan entretenida a pesar de que su argumento sea escasamente original, de que Cameron plagie y se autoplagie contando la eterna batalla entre ángeles y depredadores. Avatar, además de su revolución técnica, disponía a su favor en los oscars con la hipnosis que acompaña a la rotura de taquillas, a haber saciado la demanda de todo tipo de espectadores, pero sorprendentemente esta vez no ha triunfado el poderío económico y se ha quedado a tres merecidas velas. No se puede tener todo.
Han existido cosas muy justas en la concesión de esas estatuillas que otorgan un perdurable lugar en el sol. El secreto de sus ojos, película con esa cualidad tan rara de alborotarte la cabeza y tocarte el corazón, ese mecanismo perfecto que logra absoluta armonía entre el cine negro, el cine político y el cine romántico, sin prescindir del humor y de situaciones de comedia en una geografía trágica, ha logrado que le reconozcan la trascendencia que le negó el jurado del Festival de San Sebastián o en la absurda identidad española que le adjudicaron los Goya a una película que desprende olor a Argentina por todos sus poros. El mérito es mayor al tener que competir con brillantes pesos pesados como la devastadora La cinta blanca y la claustrofóbica Un profeta.
Nadie dudaba de que al estoico y marginal El Nota, al tan sexy como infeliz pianista de aquellos fabulosos hermanos Baker, al siempre excelente Jeff Bridges, sus compañeros de profesión le debían el inaplazable reconocimiento oficial. Su cantante country en Corazón rebelde, borracho y perdedor, superviviente y cínico, más solo que la una aunque su vieja leyenda le sirva a éste para despertarse acompañado de vez en cuando en moteles casposos, es un personaje ideal para que Bridges le aporte cuerpo y alma, piedad e ironía, clase y machaqueo existencial. Él es lo incuestionablemente memorable de esta simpática película. Tampoco han aparecido absurdas discrepancias a la hora de reconocer el enorme talento de Christoph Waltz componiendo al único personaje inolvidable de Malditos bastardos, a ese nazi sinuoso y maquiavélico, teatral y cruel, embaucador y ladino, especializado en detectar y cazar judíos. También la Mo'Nique de Precious, esa madre sádica que se ensaña cotidianamente con su adiposa, desamparada y trágica hija, es un personaje al que no nos cuesta ningún trabajo odiar. No tengo opinión sobre el Oscar a Sandra Bullock (actriz que nunca me ha sugerido demasiadas cosas gratas) ya que no se ha estrenado aquí ni la distribuidora se ha molestado en proyectárnosla previamente. Y, como casi siempre, mi película favorita se ha quedado en blanco. Es esa inteligente y compleja comedia titulada Up in the air. El desdén de la Academia no afecta a su encanto.
PD: Coincido absolutamente en todo lo que comenta este señor en su análisis. Sobre todo en lo de 'Up in the Air'. Muchísimas felicidades también a Juan José Campanella por ese merecido premio y por ese peliculón que nos ha brindado, y por supuesto, felicidades al único, al imprescindible, al soberbio Jeff (The Dude) Bridges. Posiblemente el Oscar más justo de todos.
por Carlos Boyero
Kathryn Bigelow es una mujer extremadamente alta y de anatomía espléndida, rostro atractivo, melena cuidada, curvilínea, con movimientos sugerentes. Tiene 58 años muy cuidados. Si no conocieras su profesión, podrías deducir con escaso margen de error que fue actriz, bailarina, modelo, chica de calendario. Su imagen se presta al estereotipo fácil. Pero es directora de cine, capitana de barcos en los que desde sus ancestros casi toda la marinería son machos. La temática que le atrae y en la que ha demostrado tanta vocación como virtuosismo no son las historias intimistas y líricas, retratos de la sensibilidad femenina, comedias sutiles y demostrativas de la eterna lucha de sexos, sino la acción pura y dura, aventuras broncas y violentas habitadas mayoritariamente por hombres, un cine que despide aroma masculino. Yo me la imagino haciendo su trabajo como la teniente Ripley en la nave Nostromo, como la existencialista y forzosamente épica doctora Cartwigh en 7 mujeres, como Viena en Johnny Guitar. Cuestión no sólo de talento. También de personalidad, de ovarios.
Si repasas su filmografía, poblada por una policía femenina a la caza de asesino psicópata, atracadores surferos, cine negro y virtualidad en Los Ángeles del futuro, soldados rusos en un submarino nuclear a punto de hecatombe y otras temáticas sobre las que inevitablemente planea la sangre, no es sorprendente que esta directora se haya sentido en su ambiente contando la espeluznante cotidianidad, el obligado heroísmo, la incalculable sangre fría de especialista del ejército cuyo trabajo consiste en rastrear y desactivar bombas, en convivir permanentemente con la muerte tratando de ahuyentarla. En tierra hostil retrata ejemplarmente esa tensión, la sobredosis de adrenalina, el miedo, la neurosis que puede acarrear. Posee la atmósfera y el tono de los buenos documentales bélicos, la transmisión de esa cosa que puede ser intolerable y llamada realidad.
El lenguaje realista de Bigellow se ha impuesto al imaginativo y apabullante despliegue de efectos especiales, de milagros por ordenador, de sorpresas visuales que ha creado su ex marido James Cameron, el hombre que nunca se equivoca en las demandas del gran público, en esa historia que me resulta tan entretenida a pesar de que su argumento sea escasamente original, de que Cameron plagie y se autoplagie contando la eterna batalla entre ángeles y depredadores. Avatar, además de su revolución técnica, disponía a su favor en los oscars con la hipnosis que acompaña a la rotura de taquillas, a haber saciado la demanda de todo tipo de espectadores, pero sorprendentemente esta vez no ha triunfado el poderío económico y se ha quedado a tres merecidas velas. No se puede tener todo.
Han existido cosas muy justas en la concesión de esas estatuillas que otorgan un perdurable lugar en el sol. El secreto de sus ojos, película con esa cualidad tan rara de alborotarte la cabeza y tocarte el corazón, ese mecanismo perfecto que logra absoluta armonía entre el cine negro, el cine político y el cine romántico, sin prescindir del humor y de situaciones de comedia en una geografía trágica, ha logrado que le reconozcan la trascendencia que le negó el jurado del Festival de San Sebastián o en la absurda identidad española que le adjudicaron los Goya a una película que desprende olor a Argentina por todos sus poros. El mérito es mayor al tener que competir con brillantes pesos pesados como la devastadora La cinta blanca y la claustrofóbica Un profeta.
Nadie dudaba de que al estoico y marginal El Nota, al tan sexy como infeliz pianista de aquellos fabulosos hermanos Baker, al siempre excelente Jeff Bridges, sus compañeros de profesión le debían el inaplazable reconocimiento oficial. Su cantante country en Corazón rebelde, borracho y perdedor, superviviente y cínico, más solo que la una aunque su vieja leyenda le sirva a éste para despertarse acompañado de vez en cuando en moteles casposos, es un personaje ideal para que Bridges le aporte cuerpo y alma, piedad e ironía, clase y machaqueo existencial. Él es lo incuestionablemente memorable de esta simpática película. Tampoco han aparecido absurdas discrepancias a la hora de reconocer el enorme talento de Christoph Waltz componiendo al único personaje inolvidable de Malditos bastardos, a ese nazi sinuoso y maquiavélico, teatral y cruel, embaucador y ladino, especializado en detectar y cazar judíos. También la Mo'Nique de Precious, esa madre sádica que se ensaña cotidianamente con su adiposa, desamparada y trágica hija, es un personaje al que no nos cuesta ningún trabajo odiar. No tengo opinión sobre el Oscar a Sandra Bullock (actriz que nunca me ha sugerido demasiadas cosas gratas) ya que no se ha estrenado aquí ni la distribuidora se ha molestado en proyectárnosla previamente. Y, como casi siempre, mi película favorita se ha quedado en blanco. Es esa inteligente y compleja comedia titulada Up in the air. El desdén de la Academia no afecta a su encanto.
PD: Coincido absolutamente en todo lo que comenta este señor en su análisis. Sobre todo en lo de 'Up in the Air'. Muchísimas felicidades también a Juan José Campanella por ese merecido premio y por ese peliculón que nos ha brindado, y por supuesto, felicidades al único, al imprescindible, al soberbio Jeff (The Dude) Bridges. Posiblemente el Oscar más justo de todos.
miércoles, 3 de marzo de 2010
Guiones Nominados (Oscars y Spirit Awards)
Ya llegan, ya están aquí, y un año más, otra noche de insomnio que acabará conmigo. A continuación os hago una lista de todos los guiones nominados y mis intuiciones con cada uno de ellos.
OSCARS.
(domingo 7 de Marzo)
Guión Original:
-The Hurt Locker (En tierra hostil) de Mark Boal (ganador)
-Inglorious Basterds (Malditos Bastardos) de Quentin Tarantino
-The Messenger de Alessandro Camon y Oren Moverman
-A Serious Man (Un tipo serio) de Joel Coen & Ethan Coen
-Up de Bob Peterson y Pete Docter
Por supuesto, yo se lo daría a los Coen, pero no sé, me da a mí que está difícil la cosa este año. Además ya tienen muchos de éstos en sus casas, así que, aunque creo que sin duda la gran triunfadora de la noche será The Hurt Locker, quizás los académicos opten por premiar a Tarantino en esta categoría (sería su segundo Oscar al mejor guión tras el de Pulp Fiction), e incluso por qué no, a The Messenger.
Guión Adaptado:
-District 9 de Neill Blomkamp y Terri Tatchell
-An Education de Nick Hornby
-In the Loop de Jesse Armstrong, Simon Blackwell, Armando Iannucci y Tony Roche
-Precious de Geoffrey Fletcher (ganador)
-Up in the Air de Jason Reitman y Sheldon Turner
Mi apuesta para esta categoría es claramente Up in the Air. Me gusta bastante el guión de In the Loop y aprecio mucho a Nick Hornby por sus increíbles novelas, pero sintiéndolo mucho, este Oscar creo que tiene un dueño claro.
SPIRIT AWARDS (premios del cine independiente).
(viernes 5 de Marzo)
Mejor Guión:
-The Vicious Kind de Lee Toland Krieger
-The Messenger de Alessandro Camon y Oren Moverman
-The Last Station de Michael Hoffman
-Adventureland de Greg Mottola
-(500) Days of Summer de Scott Neustader y Michael H. Weber (ganador)
Creo firmemente que se lo darán a Scott Neustader y Michael H. Weber por esta joya llamada (500) Days of Summer, aquí traducida como (500) Días juntos. A mí me engancharon desde las dos primeras páginas de guión, ésas en las que pone a modo de dedicatoria "Specially you Jenny Beckman. Bitch". Incomprensiblemente no está nominada en los Oscar, algo que no termino de entender my bien, pero bueno. Adventureland tiene también todos los ingredientes del buen cine independiente norteamericano de estos tiempos, pero no le llega a la anterior ni a la suela de los zapatos.
Mejor Primer Guión:
-Precious de Geoffrey Fletcher (ganador)
-Crazy Heart de Scott Cooper
-Cold Souls de Sophie Bartes
-Amreeka de Cherien Dabis
-A Single Man de Tom Ford y David Scearce
Seguramente le caiga a Geoffrey Fletcher por Precious. Nada más que añadir, así de simple.
P.D: Puede que Morgan Freeman haga un papelón interpretando a Nelson Mandela, pero este blog desea con toda su alma que el Oscar al mejor actor vaya para El Nota, quiero decir, para el grandísimo Jeff Bridges por Crazy Heart. Ánimo Jeff, a la quinta va la vencida.
ACTUALIZACIÓN
Bueno, en cuanto a los Spirit Awards perfecto, en los Oscar, que gane el premio al mejor guión original la que ha ganado a mejor película me parece bastante coherente. Respecto al guión adaptado, me sigue pareciendo mucho mejor el guión de Up In the Air que el de Precious, que también es muy bueno, pero no tanto.
OSCARS.
(domingo 7 de Marzo)
Guión Original:
-The Hurt Locker (En tierra hostil) de Mark Boal (ganador)
-Inglorious Basterds (Malditos Bastardos) de Quentin Tarantino
-The Messenger de Alessandro Camon y Oren Moverman
-A Serious Man (Un tipo serio) de Joel Coen & Ethan Coen
-Up de Bob Peterson y Pete Docter
Por supuesto, yo se lo daría a los Coen, pero no sé, me da a mí que está difícil la cosa este año. Además ya tienen muchos de éstos en sus casas, así que, aunque creo que sin duda la gran triunfadora de la noche será The Hurt Locker, quizás los académicos opten por premiar a Tarantino en esta categoría (sería su segundo Oscar al mejor guión tras el de Pulp Fiction), e incluso por qué no, a The Messenger.
Guión Adaptado:
-District 9 de Neill Blomkamp y Terri Tatchell
-An Education de Nick Hornby
-In the Loop de Jesse Armstrong, Simon Blackwell, Armando Iannucci y Tony Roche
-Precious de Geoffrey Fletcher (ganador)
-Up in the Air de Jason Reitman y Sheldon Turner
Mi apuesta para esta categoría es claramente Up in the Air. Me gusta bastante el guión de In the Loop y aprecio mucho a Nick Hornby por sus increíbles novelas, pero sintiéndolo mucho, este Oscar creo que tiene un dueño claro.
SPIRIT AWARDS (premios del cine independiente).
(viernes 5 de Marzo)
Mejor Guión:
-The Vicious Kind de Lee Toland Krieger
-The Messenger de Alessandro Camon y Oren Moverman
-The Last Station de Michael Hoffman
-Adventureland de Greg Mottola
-(500) Days of Summer de Scott Neustader y Michael H. Weber (ganador)
Creo firmemente que se lo darán a Scott Neustader y Michael H. Weber por esta joya llamada (500) Days of Summer, aquí traducida como (500) Días juntos. A mí me engancharon desde las dos primeras páginas de guión, ésas en las que pone a modo de dedicatoria "Specially you Jenny Beckman. Bitch". Incomprensiblemente no está nominada en los Oscar, algo que no termino de entender my bien, pero bueno. Adventureland tiene también todos los ingredientes del buen cine independiente norteamericano de estos tiempos, pero no le llega a la anterior ni a la suela de los zapatos.
Mejor Primer Guión:
-Precious de Geoffrey Fletcher (ganador)
-Crazy Heart de Scott Cooper
-Cold Souls de Sophie Bartes
-Amreeka de Cherien Dabis
-A Single Man de Tom Ford y David Scearce
Seguramente le caiga a Geoffrey Fletcher por Precious. Nada más que añadir, así de simple.
P.D: Puede que Morgan Freeman haga un papelón interpretando a Nelson Mandela, pero este blog desea con toda su alma que el Oscar al mejor actor vaya para El Nota, quiero decir, para el grandísimo Jeff Bridges por Crazy Heart. Ánimo Jeff, a la quinta va la vencida.
ACTUALIZACIÓN
Bueno, en cuanto a los Spirit Awards perfecto, en los Oscar, que gane el premio al mejor guión original la que ha ganado a mejor película me parece bastante coherente. Respecto al guión adaptado, me sigue pareciendo mucho mejor el guión de Up In the Air que el de Precious, que también es muy bueno, pero no tanto.
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